Evita el ‘greenwashing’, la sustentabilidad empresarial no es una moda
Las empresa son más conscientes de la importancia de ser sostenibles, no obstante, el greenwashi...
Las empresas del país con un sistema integral de gestión ambiental y social pueden aumentar sus oportunidad de negocio, tal como lo señala la encuesta Desarrollo Sostenible en México 2018 de la firma KPMG, sin embargo, sólo 30% de los directivos encuestados cuentan con un esquema de ese tipo en su organización.
El creciente poder e influencia de los organismos de regulación ambiental y laboral aunado a un mayor interés de estos temas por los clientes finales obliga, en mayor medida, a establecer estándares que demuestren el compromiso sustentable de una institución o compañía, señala la Corporación Financiera Internacional (por sus siglas en inglés el IFC).
El Sistema de Gestión de Riesgos Ambientales y Sociales (SARAS) como un instrumento de gestión con el cual se puede identificar metodologías y herramientas para definir el nivel de riesgo socio-ambiental de una operación o proyecto de inversión, define el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext) en su portal.
A través del SARAS se establecen estándares ambientales y sociales para evaluar los riesgos en una operación de una empresa, en el análisis del BID, esta parte se vuelve fundamental para mejorar la reputación y disminuir los riesgos del proyecto.
En mayor medida las instituciones financieras internacionales toman en cuenta las regulaciones ambientales y sociales en sus propias operaciones e, incluso, que pueda tener un negocio para financiarlo.
“La sostenibilidad en las operaciones de préstamos ha demostrado ser una poderosa fuente de innovación y ha generado nuevos negocios”, reitera el BID en el documento.