Estos sectores son clave para el financiamiento ‘verde’

Cada vez más empresas en el mundo tienen más conciencia de optar por medidas o proyectos que disminuyan el  impacto al medio ambiente. En este contexto, los bonos verdes se han convertido en una alternativa de financiamiento con mayor oportunidad en sectores como la agricultura, agua, construcción sustentable, eficiencia energética, energía y transporte limpio, dice el Banco Mundial.

Los proyectos financiados con este tipo de bonos emitieron, a septiembre de 2017, 135 bonos verdes en 18 diferentes divisas, equivalente a 10,200 millones de dólares, explicó el organismo multilateral. El capital obtenido a través de este mecanismo de crédito se destina a proyectos nuevos o ya existentes alineados a los Green Bond Principles (GBP), principios emitidos por la International Capital Markets Association (ICMA, por sus siglas en inglés) y el Banco Mundial.

A través de estos lineamientos se promueve la integridad del mercado de bonos, la transparencia y su divulgación. Una vez que se cumpla con esas prácticas, para que un bono pueda recibir la certificación ‘verde’ deben destinarse a las siguientes categorías:

  • Energía renovable: generación de energía desde la construcción, operación y mantenimiento de proyectos de infraestructura eólica, solar, hidroeléctrica y geotérmica.
  • Construcción sustentable: mejoras en edificios existentes, incluyendo, mecanismos de distribución de agua y energía.
  • Eficiencia energética: mejoría en tecnología, procesos, equipos e instalaciones para reducir el uso de energía y emisiones contaminantes, puede incluir el reciclaje.
  • Transporte limpio: proyectos de movilidad con motores eléctricos, incluyendo estaciones de carga para vehículos eléctricos, así como mejoras en eficiencia energética de los sistemas de transporte.
  • Agua-adaptación: infraestructura para la potabilización y distribución de agua potable, incluyendo proyectos rurales. La revitalización de ríos y restauración de hábitat, así como adaptación y control de sequías e inundaciones.
  • Agricultura verde: desarrollo de agricultura orgánica, sostenible y ecológica. Proyectos sobre cadenas de abastecimiento de alimentos. Restauración ecológica y prevención de desastres.
  • Bioenergía: Construcción, operación y mantenimiento de proyectos de generación de energía con biomasa y biocombustibles.