Cali-Baja es un ejemplo de cómo una región binacional –formada por el Sur de California y Baja California– logran integrarse y competir a nivel global como una región. Es una estrategia de desarrollo económico de largo plazo como un consorcio público-privado con el condado de San Diego y el Valle de Imperial. Carlo Bonfante Olache, secretario de desarrollo económico de Baja California relata en entrevista para la Revista Comercio Exterior de Bancomext cómo lograron construir una entidad competitiva en sectores estratégicos.
La economía de California es 8.5 veces más grande que la economía de Arizona y la economía de Arizona es 10 veces más grande que la de Baja California. Sin embargo, el intercambio comercial de Baja California con California representa 9 mil millones de dólares anuales.
La integración entre las economías ¿cómo funciona la región Cali-Baja?
Tenemos un triángulo de oportunidad donde la cercanía de Mexicali y Phoenix, de Tucson y Casas Grandes, y de San Diego y Tijuana, facilita mucho la sinergia en sectores como el turismo médico, en las industrias aeroespacial, electrónica y de instrumentos médicos, lo que permite la integración de la región.
¿Qué acciones se han llevado a cabo para impulsar esta iniciativa?
Ari-Baja plantea beneficios mutuos ante la reconsideración de las reglas de comercio del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). En los primeros días del año tuvimos una reunión con los ejecutivos de la Comisión Arizona-México y las autoridades de comercio de Phoenix para ver las condiciones que permitan tener un acuerdo de colaboración con la intención de incorporar la región Ari-Baja con la de Cali-Baja. También se trabaja en un memorándum de entendimiento como base para constituir una entidad legal.
Vivimos en una economía global. Nuestra ubicación geográfica y el intercambio que tenemos con las ciudades y el estado de California nos han hecho desde el principio tener una capacidad y un desarrollo de exportación importantes. Somos bi-culturales, manejamos bien el inglés, fuimos educados
¿Cuál ha sido el logro más importante de Cali-Baja?
El año pasado, la iniciativa patrocinó el Foro Mundial de Inversión Extranjera Directa (World Forum for Foreign Direct Investment), que se llevó a cabo en San Diego se enfocó en las oportunidades de inversión en la región de San Diego–Tijuana, cuya población conjunta es de 6.5 millones de personas. El evento logró atraer la mirada hacia la región: participaron 350 personas, muchas de ellas representando a grandes corporaciones de inversionistas.
Con la infraestructura que hemos desarrollado en el estado en materia ferroviaria, portuaria, de aeropuertos y, obviamente, con el fortalecimiento de las plantas desaladoras, estamos generando condiciones de logística y competitividad que nos están dando resultados por encima de los 2 mil 500 mdd anuales de inversión extranjera, un crecimiento superior a los 50 mil empleos y una tasa de desocupación por debajo de 2.8%.
¿Cuáles son ahora las industrias más importantes para cada una de estas iniciativas?
Si bien el intercambio comercial entre Arizona y Baja California es mucho menor que el que tenemos con California, hay que impulsar de manera decisiva las industrias aeroespacial y electrónica, principalmente. Debemos recordar que contamos con una industria aeroespacial muy fuerte a nivel nacional. Somos líderes en la producción de vino, en nanotecnología, en la fabricación de televisores. Hay condiciones de transformación importantes en el campo, pero todo eso requiere que a diario trabajar para mejorar el entorno de negocios en la frontera.
¿Y cuáles son los mercados con mayores oportunidades? ¿Con qué productos o servicios en cada caso?
Lo que he comentado nos permite establecernos en este momento ante Asia como un país emergente que puede darle la cobertura que —en un momento dado, con las políticas que está manejando el Gobierno de Estados Unidos— pudiera requerir. Muchas empresas de Asia ven a Baja California como una plataforma que las puede llevar a ser más competitivas en sus exportaciones y a entrar en el mercado nacional.
Estamos buscando alianzas con China, buscando las alianzas correctas para que vengan aquí a instalarse y a desarrollar la cadena productiva, un proceso en el que desde un principio estamos tratando de corregir los modelos anteriores, que realmente le dé juego a la cadena de valor de productos mexicanos. Hacia allá estamos volteando ahora las antenas.