Un buen estudio de mercado determinará el éxito de tu pyme
El estudio de mercado es uno de los factores claves para competir en el comercio internacional. T...
Las cadenas globales de valor permiten que un producto pueda ser diseñado en un país mientras que la fabricación de sus piezas y el ensamblaje se realice en otro lugar, tal como se produce 80% de los productos a nivel internacional, de acuerdo con la Organización Mundial del Comercio (OMC). Por ello, las pymes exportadoras encuentran beneficios al integrarse en las cadenas de suministro.
Con las cadenas globales, las pymes incrementan su productividad gracias a la adopción de nuevas tecnologías y la facilidad de acercarse a nuevas tendencias sobre comercio y financiamiento, detalla la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Ser parte de estas cadenas internacionales les permite la difusión de innovaciones y llegar a nuevos mercados.
Una pyme puede participar en las cadenas globales de valor en cualquier nivel. Desde el más sencillo, por ejemplo, una maquila que ofrece una ventaja en costos de producción pero puede ser igualada eventualmente por otros mercados, o bien, en niveles más altos donde crea una mayor dependencia por parte del cliente debido a la presencia de un mayor valor agregado que difícilmente podrá ser reemplazado por otro proveedor.
Así, las pymes cuentan con la facilidad de acceder a mercados diversificados, por ende, a participar en las cadenas globales de valor que son un eje crucial para elevar su competitividad. La Cepal destaca estas ventajas para las pequeñas y medianas empresas: