Conoce los Pueblos Mágicos más atractivos para los viajeros
Estas regiones son ideales para atraer cualquier tipo de turismo por su riqueza cultural, gastron...
Las tendencias en hotelería son tan variadas como antagónicas y todas tienen sus propios fans. Mientras muchos expertos anuncian el amanecer de los hoteles inteligentes, con comandos de voz, entretenimiento en streaming, servicios vía apps y otras tecnologías, hay quienes encabezan las filas de lo natural con calor de hogar y los sabores de una cocina que, como experiencia única, se vuelva el principal atractivo. Así nacen los hoteles gourmet.
A 60km de la Ciudad de México, Marco Margain es el chef y dueño de la Hacienda de San Andrés quien decidió, junto a su esposa Mariana Silva, abrir un hotel gourmet que fuese punta de lanza en el país.
“Nuestro objetivo último es ayudar a cambiar los patrones de consumo hacia lo que llamamos agricultura con cultura. Es decir, agricultura basada en la observación de la naturaleza y el uso de semillas fértiles, de materia orgánica y biofertilizantes para lograr que la tierra nos devuelva un producto único en sabor”, explica Marco Margain.
Este matrimonio tomó la hacienda San Andrés que era un hotel spa y redefinió su propuesta como hotel gourmet. La conjunción de la pareja fue clave en esta decisión. Él es chef y ella agricultora y granjera. Así, logran preparar los más deliciosos platillos mexicanos, en un estilo sencillo pero lleno de sabores y olores que se tornan únicos por el trabajo de preparación de la tierra desde donde los obtienen, apenas antes de pasar por la cocina, para llegar a la mesa de sus visitantes.
Las claves de un hotel gourmet exitoso
Para el matrimonio Silva-Margain, dueños de Hacienda San Andrés Hotel Gourmet, el éxito de este estilo hotelero lo determina en primer lugar el contar con una granja o huerto propios para garantizar la calidad de los productos a utilizar en la cocina, y si no, proveedores que sean productores directos.
La sensibilidad del personal y calidez en el trato de los visitantes es otro factor importante, así como tener un bar con una buena cava, no muy extensa pero con productos escogidos especialmente para acompañar la gastronomía y dar categoría al menú.
Finalmente, la combinación de tradición, cultura e identidad, reflejada en el producto han llevado a estos emprendedores a la conclusión de que volver al inicio de la cocina mexicana, es el valor diferencial de su propuesta gourmet y ello implica, el trabajo cuidadoso de la tierra. “Si enriqueces y nutres tu tierra, lo que te da en regreso es generosísimo en sabor, olor, textura y gusto. Y eso, el paladar del turista que viene para disfrutarlo, lo nota”, asegura Margain.
Una tendencia que promete quedarse
Hoy los foodies (influencers que promueven la gastronomía a través de sus redes) se han convertido en un boca en boca exponencial. Ellos generan confianza a través de sus redes y de esta forma se convierten en portavoces importantes de las nuevas propuestas gourmets.
“Es una relación simbiótica positiva, como cocineros, vivimos este gran momento donde hoy resalta más el nombre del chef que del lugar, pues así era antes, y al mismo tiempo vivimos esta exposición de fotos de gastronomía a través de la gente y sus redes”, comenta Margain.
Para Margain y Silva, el futuro de los hoteles gourmet no sólo es prometedor; ellos aseguran que el término ‘hotel’ pasará a segundo plano porque la gente priorizará la elección por la comida y luego, la posibilidad de quedarse a dormir en el lugar.